Argumento 1
Con mis propias palabras:
Dejando a un lado los motores actuales de la política mundial moderna y ubicándonos en nuestro estado, publico lo siguiente: el punto esta en que la política en Colombia no se basa en la moral (individual o social de la nación) o en la acción de la política (que es la actividad humana que tiende a gobernar o dirigir la acción del Estado en beneficio de la sociedad) hay variables que no son controladas por el mismo estado, estas se encuentran en el orden económico que realmente rigen la política y la moral que construyen el camino a transitar. Este precepto económico mundial formula principios legales (algunas veces ilegales) impostados por las necesidades mundiales para crear falsos avances sociales que traen consigo una política de autonomía de estado (deber ser) que de todas formas llegan a saber sobre los hilos invisibles controladores de un estado universal.
• Frase del autor que desafía mi argumento
“Otra versión de esta moral que prescinde de la política es la que Max Weber llama ‘ética de la convicción’. Esta moral, aunque reconoce que tiene consecuencias políticas, se desentiende de ellas. Vale decir: el sujeto moral (individual o colectivo) no asume la responsabilidad de sus actos o efectos políticos. Al absolutizar los principios y desentenderse de las consecuencias de su aplicación, esta ‘moral de la convicción’ o de los principios viene a proclamar la máxima de ‘¡Sálvense los principios, aunque se hunda el mundo!’. En la política impregnada de semejante moral, la fidelidad incondicional a los principios (o también al jefe o al partido que los encarna), se conjuga forzosamente con la indiferencia ante sus consecuencias”. (Página 278)
Argumento 2
Con mis propias palabras
“sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres”
El punto esta en; sea cual sea la forma de gobierno (Aristocrática, Democrática, Monárquica) y la zona de formulación (Micro o Macro social) se debe plantear un instrumento práctico-instrumental en la operación que responda el ¿cómo?, a su vez y con las nuevas formas políticas de nuestros precandidatos presidenciales es absolutamente necesario no solo poder ser realizable cada propuesta por pequeña o grande que sea, se trata también de llegar al poder y para llegar a tal fin (se puede entonces recurrir a presionar a electores con los recursos de un estado asegurando la permanencia del un mandatario de lo contrario no tendrán el subsidio que tanto les conviene) no se necesita en ningún sentido realizar una revolución y emancipación completamente contradictoria o diferente al estado actual.
• Frase del autor que reafirma mi argumento
“Ahora bien, puesto que se trata, sobre todo en una política emancipadora, de convertir un proyecto, idea o utopía en realidad, ese aspecto práctico-instrumental es insoslayable. Ciertamente, si en esta política han de conjugarse fines y medios, o también sus aspectos ideológico-valorativo y práctico-instrumental, no se puede aceptar
en modo alguno una política que se presenta como emancipadora y que se desentiende de ese lado práctico-instrumental”. (Página 280)
Argumento 3
Con mis propias palabras
-El perdón no reemplaza la justicia-
La utopía en el discurso de Adolfo Sánchez demuestra una vez más que las buenas ideas de izquierda y en cierta forma desobedeciendo a Marx, son posibles siempre y cuando se priorice a la forma de la objeción de conciencia, en tanto que esta es la primera forma de unión de las masas oprimidas por la injusticia, y hasta ese momento se integrará la condición de clase explotada con fuerza para el cambio.
• Frase del autor que reafirma mi argumento
“Al no legitimar la ‘acción militante’, y menos aún en su forma revolucionaria, la práctica política queda reducida a la desobediencia civil y a la objeción de conciencia. Rawls aprueba la primera, es decir, la desobediencia civil, por considerarla una conducta ‘pública, ilegal y no violenta’, que tiende a modificar la ley pero sin cambiar el sistema. Y aprueba también la segunda opción, en este caso, la objeción de conciencia, aunque con alguna reserva, pues si bien la considera legítima por su primer principio de la teoría de la justicia (el de la libertad igual para todos), no la considera así por su segundo principio de justicia (el de las desigualdades económicas y sociales inadmisibles), si éstas garantizan la igualdad de oportunidades y resultan ventajosas para los miembros más desfavorecidos de la sociedad”. (283)
Argumento 4
Con mis propias palabras
La acción colectiva a una política medida por la moral del individuo en consenso, no hace parte del listado de acciones de un político y, aún si lo fuera el sistema atraparía, perjudicaría y desaparecería a aquel que juzgue y cambie los intereses y privilegios ya obtenidos por la acción inmoral de unos que se vieron en el poder político. Partiendo de la situación real y con el pensamiento utópico de las acciones de Adolfo Sánchez se obtendría una distopía de sublevaciones devolutivas destinadas a encontrar en cada época un cambio destinado a suprimir la injusticia produciendo en algún momento la acción de desobediencia civil y la reacción la acción militante por parte de algún actor.
• Frase del autor que reafirma mi argumento
“En verdad, no hay en ella ninguna referencia a las condiciones reales necesarias, a los medios que han de emplearse ni a los sujetos políticos y sociales que han de realizar, o aproximarse a, la sociedad ideal diseñada. Lo cual exigiría no sólo una teoría de la justicia que ha de dominar en la sociedad ideal -preocupación fundamental de Rawls- sino también una teoría de la injusticia en la sociedad realmente existente que, por el contrario, poco le preocupa. Se trataría de una teoría que exigiría, a su vez una teoría de la práctica política necesaria -o sea, de la ‘acción militante’- que Rawls descarta, tanto para combatir las injusticias de la sociedad occidental realmente existente como para transformar el sistema capitalista que las genera”. (283)
Argumento 5
Con mis propias palabras
Por supuesto, hay para este tiempo dirigido y regido por el sistema económico actual unos valores y una política como lo hubo para cada época o tiempo de nuestra historia, solo que en esta ocasión las desigualdades sociales y la destrucción de la naturaleza han causado un detrimento humano acercándose a un conflicto de proporciones universales si antes no creamos conciencia en la unidad humana.
• Frase del autor que reafirma mi argumento
Llegamos así al final de esta reflexión. Al propugnar la unión de lo que se encuentra desunido en la relación entre política y moral, tenemos en la mira la política que persigue construir una alternativa al mundo injusto del capitalismo neoliberal y globalizador de nuestros días. (283)
Argumento 6
Con mis propias palabras
La clara evidencia en el orbe para la humanidad son las claras desigualdades donde cerca de mil millones de personas de las seis mil millones podrían morir de hambre en cualquier momento. La clara organización capitalista promueve la tierra no para la alimentación sino par la extracción de materiales comestibles o vanidosos para las dos terceras partes de la humanidad dejando a un lado la conciencia moral universal.
Etiquetas: Filosofía Política